21 de septiembre de 2010

TALLER MASAJE SHIATSU




SHIATSU EN RELACION CON LA MATERNIDAD
Para empezar, explicar que el SHIATSU es una forma de medicina tradicional oriental nacida en Japón alrededor del siglo VI a.c. –es posible que incluso antes de esto ya que como en todas las culturas tradicionales a lo largo del tiempo, una forma de sanación manual a través del tacto, haya existido.
En este caso, Shiatsu nació de una forma de masaje llamado Amna el cual, era practicado por ciegos en la corte imperial y en los baños públicos. también, fue practicado ampliamente por las comadronas tradicionales conocidas como “Sambas”. En 1925, la asociación de terapeutas del Shiatsu fue formada para promover Amna como terapia “de remedio” a la que se le añadió la teoría anatómica y fisiológica de la medicina occidental, llamándola, Shiatsu y catalogándola como medicina preventiva. Su fin es la de restablecer el equilibrio del flujo energético del ser humano para llegar a la salud total del cuerpo, la mente y el espíritu.
La principal herramienta del Shiatsu son las manos del terapéuta que se ha preocupado en desarrollarlas para establecer una profunda comunicación entre la persona que recibe y éste/esta.
Con el Shiatsu se pueden tratar problemas físicos ya sean afecciones musculares, o seas u orgánicas; atendiendo para ello a la relación que existe entre el problema y la emoción que subyace detrás de éste.
Estados emocionales tan comunes hoy en día como la ansiedad, depresión, angustia y fobias, se pueden resolver equilibrando el patrón energético que está mal funcionando debido a un bloqueo que seguramente se produjo a raíz de un hecho concreto que a su vez produjo una emoción determinada y que no supimos o no pudimos canalizar correctamente.
Otro aspecto del Shiatsu es la de apoyar a la mujer, regulando su ciclo menstrual y manteniéndola equilibrada durante el embarazo, el parto y el post parto.
Shiatsu en este sentido, ha sido usado para aliviar las nauseas matutinas y la acidez de estómago durante el primer trimestre del embarazo, para inducir el parto, para acelerar y acortar la primera y segunda etapa de éste y como anestésico durante este proceso.
Hay evidencias de otros beneficios obtenidos a través del Shiatsu durante el embarazo. Un estudio realizado a 26 mujeres en el Reino Unido que recibieron 20 minutos de tratamiento dos veces a la semana, mostró que hubo un descenso de ansiedad considerable, las mujeres presentaban una mejoría en su estado anímico, dormían mejor, tenían menos dolor de espalda y presentaban menos retención de líquidos en las piernas.
El enfoque y la importancia del Shiatsu, está en que es un camino para conectar emocionalmente a través del tacto y para ello he elegido una frase de Tokujiro Namikoshi (fundador de la primera escuela de Shiatsu en Japón; –anteriormente a éste los conocimientos de Shiatsu se pasaba del padre o la madre al hijo o la hija de una misma familia) todavía conocida en Japón, “shiatsu no kokoro wa haha gokoro”.
“el corazón del Shiatsu es el amor de una madre”.

Herminia Fernández.
Terapeuta de Shiatsu desde 1995

Cursó sus estudios: en la Bristol School of Shiatsu y en el Shiatsu College